Ya son 28 años de carrera de los Chancho en Piedra. Mucha agua ha pasado bajo el puente y este show conmemorativo de sus tres primeros discos daba el pie para rememorar esos locos noventas, época de oro de la industria musical chilena, de la cual los oriundos de La Cisterna son los primeros en ser nombrados como ejemplo de esa época.
Llegando al Teatro Cariola, se hacía notar el público fiel que tiene la banda. Los juanitos se veían en las afueras del recinto. Dentro del lugar, ya estaban posicionados en la primera fila algunos fieles marranos, los lienzos estaban puestos en la galería y de a poco entraba la gente. Con un leve atraso se apagaron las luces del teatro y comenzó una voz radial, una presentación de la banda que representa los samples introductorios de sus discos. Entra Lalo, Felipe, Toño, y C-Funk comienza el riff de ‘Hacía el Ovusol’ e inmediatamente el público se volvió loco. Desde el palco de los gráficos se veía una horda de juanitos entrando a las primeras filas, mientras pasaba ‘Huevos Revueltos’, ‘Rock’, ‘Sinfonía de Cuna’, casi sin freno y con show pirotécnico.
Lalo Ibeas vestido de pikachu poco a poco soltaba los primeros agradecimientos al público, hubo poca interacción al comienzo y es que el setlist pasaba las 20 canciones. Así tocaron ‘No quiero verte’ que generó un gran pogo donde los juanitos iban de lado a lado, ‘Realizo todo bien’, Moscardón’, y poco a poco aflojaron el acelerador y comenzaron los recuerdos de sus primeros años donde los shows terminaban en peleas o como el vocalista comentaba, una vez que un caballero despertó en un bar donde tocaron y pensó que eran monos, todo esto para introducir ‘Comiendo Banana’. Y es que el recinto también era parte de la historia de la banda, ahí mismo estuvieron en una conferencia de ufología que inspiró “Rindanse Terricolas” de 1998, como rememoraba Felipe Ilabaca.
A pesar de ser casi tres horas de show, pasó volando. Y es necesario destacar la ejecución de la banda, sobre todo en canciones que no tocaban hace tiempo y que eran más un recuerdo, sobre todo para C-Funk que no es guitarrista original y que se lució con canciones como ‘Socio’, ‘Volantín’ que contó con un interludio de jazz, o ‘Funky Tu Madre’, la que dice “ir a un recital y dejar la cagá” que refleja claramente lo que estaba pasando en el teatro. La energía en el recinto estaba muy arriba y se notaba que era una tocata noventera, habían más juanitos en el aire que celulares grabando.
Ya pasadas las 23:00 horas, que correspondía al término del show, cerraron con ‘Voy a resucitar’ y lograron generar un climax con los solos y la interpretación. Sin embargo, el público estaba eufórico y era claro que faltaban algunas papitas. Pasó más de un minuto y comenzó a sonar la introducción de “Peor es mascar lauchas” y entró la banda para interpretar ‘Chancho’ con Lalo Ibeas con una máscara marrana. Finalmente, dieron fuego a ‘Edén’ y ‘Locura Espacial’, generando locura entre los presentes y terminando con una lluvia de papel picado la noche que rememoraba los noventas. Así mismo, al término se prendieron las luces del recinto y salían asistentes llenos de sudor y con papeles pegados en la cara.
Más de tres horas tardaron los Chancho en Piedra en darle una pasada a sus locos noventas. Se nota que el tiempo ha pasado en los integrantes y esas cabelleras largas ya no forman parte del sello de la banda, sin embargo, la energía se mantiene intacta y con un público tan fiel como la comunidad marrana que los rodea. Se echó de menos los trajes estrafalarios que ocupaban en esos años, claramente, están en otra etapa de la banda y quizás no era el momento para eso. Y también podría haber sido una buena sorpresa ver a Pablo Ilabaca tocando con la banda, pero será para otro momento.
Diego Valdés Llanos
Fotos: Luciano Candia
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